Una buena dieta para adelgazar no debe ser sinónimo de alimentos sin sabor, cocidos de forma insípida o ingerir cantidades ridículas que ni siquiera son suficientes para saciar el apetito sino que además no aportan energía.
Así como la actividad física, la comida dentro de una dieta para bajar de peso debe ser motivadora con alimentos que sean sabrosos y en cantidades suficientes para no pasar hambre y sentirse cansado o de mal humor, detalles que a la larga terminan por ser la causa del abandono por parte del paciente.
De allí que es esencial realizar una dieta que pueda mantenerse durante el tiempo suficiente como para brindar resultados exitosos, además de ser saludable y equilibrada.
Esa dieta también debe ser variada y contener todos los nutrientes necesarios para mantenerse sano, con energía y de buen ánimo, todos ellos elementos fundamentales para seguir adelante y sentirse bien.
Una dieta con estas características y que puede servir de ejemplo es la siguiente:
- Desayuno
2 Rodajas de pan integral tostadas o cereales
- Almuerzo
100 grs. de paratas o arroz cocidos al vapor
100 grs. de carne o pescado
1 Tostada de pan integral
200 grs. de fruta fresca
- Merienda
- Cena
Antes de acostarse es posible beber un vaso de leche o un yogur, esto vitará la sensación de hambre e impedirá los atracones nocturnos.
Además de la dieta es necesario limitar el consumo de sal y utilizar poco aceite en las preparaciones, como máximo tres cucharadas diarias de aceite de oliva.
Sin necesidad de pasar hambre, saltear comidas este tipo de dieta es ideal para adelgazar de forma saludable y evita comer entre comidas.
Teniendo en cuenta estas pautas básicas pueden hacerse combinaciones con otros alimentos respetando siempre el bajo consumo de grasas y la preparación de los alimentos de forma saludable ya sea a la parrilla, al horno, hervidos con salsas livianas como salsa blanca light, salsa de tomates al natural.