Y hacer una práctica más duradera y con más ganas, también se traduce en mayor desgaste calórico -por lo que sería aún más recomendable si tu actividad forma parte de tu plan de adelgazamiento-.
Según los propios investigadores de la Universidad Bangor de Reino Unido, durante las mañanas las personas están más descansadas, tienen mayor atención y disposición para el ejercicio, y también suelen estar más relajadas y no sentirse tan presionados con respecto a los tiempos.
Más allá de estos resultados, lo importante está en que te reserves un tiempo en el día para tu actividad, si puede ser a primera mañana, mucho mejor, si los horarios no te dan, no interesará, lo crucial será tu compromiso y constancia para con el ejercicio.