El mercado nos ofrece mucho que beber, pero ¿cuánto hay de márketing y cuánto de beneficio real a tu rendimiento deportivo? Todo depende de tu entrenamiento o tipo de actividad.
Actividades ligeras: andar, trabajo en el jardín, tareas del hogar… incluso carrera o natación muy suaves, de menos de una hora de duración.
¿QUÉ BEBO? Agua corriente o aguas enriquecidas con sabor.
¿POR QUÉ? El agua es suficiente para reponer tus niveles de fluidos tras actividades de menos de una hora de duración. Si te cuesta beber toda el agua que necesitas, puedes probar con aguas enriquecidas que aportan sabor. Pero cuidado con las calorías, algunas contienen incluso más de las que puedes haber quemado.
CONCLUSIÓN: No necesitas un aporte calórico extra ni has perdido electrolitos, así que el agua es la bebida ideal para rehidratarte. Toma toda la que tu cuerpo te pida, entre unos 200 a 500 ml.
Entrenamientos de resistencia intensos: Correr más de una hora, salidas en bici, partidos de fútbol o baloncesto… cualquier actividad intensa de más de una hora.
¿QUÉ BEBO? Bebidas deportivas que contengan hidratos de carbono y electrolitos.
¿POR QUÉ?Más de una hora de ejercicio intenso no sólo puede afectar a tus reservas de fluidos, los niveles de energía y electrolitos también se ven afectados.
CONCLUSIÓN: Bebidas deportivas que contengan entre 4 y 8 g de azúcares por cada 100 g, además de sales y minerales. Cuidado con las bebidas más dulces, pueden afectar negativamente a tu rendimiento produciendo un efecto contrario, al hacer que tu cuerpo segregue insulina para contrarrestar la subida de glucosa.
Entrenamientos de fuerza
¿QUÉ BEBO? Batidos de proteínas o un vaso de leche desnatada chocolateada
¿POR QUÉ? Los estudios demuestran que aporta el balance correcto entre proteínas e hidratos que tus músculos necesitan para recuperarse rápidamente del esfuerzo y mejorar la masa muscular en vez de perderla.
CONCLUSIÓN: Si no puedes recurrir a un batido comercial, puedes combinar 250 ml de leche desnatada y un par de cucharadas de cacao para hacerte algo similar.
Via: runners
Actividades ligeras: andar, trabajo en el jardín, tareas del hogar… incluso carrera o natación muy suaves, de menos de una hora de duración.
¿QUÉ BEBO? Agua corriente o aguas enriquecidas con sabor.
¿POR QUÉ? El agua es suficiente para reponer tus niveles de fluidos tras actividades de menos de una hora de duración. Si te cuesta beber toda el agua que necesitas, puedes probar con aguas enriquecidas que aportan sabor. Pero cuidado con las calorías, algunas contienen incluso más de las que puedes haber quemado.
CONCLUSIÓN: No necesitas un aporte calórico extra ni has perdido electrolitos, así que el agua es la bebida ideal para rehidratarte. Toma toda la que tu cuerpo te pida, entre unos 200 a 500 ml.
Entrenamientos de resistencia intensos: Correr más de una hora, salidas en bici, partidos de fútbol o baloncesto… cualquier actividad intensa de más de una hora.
¿QUÉ BEBO? Bebidas deportivas que contengan hidratos de carbono y electrolitos.
¿POR QUÉ?Más de una hora de ejercicio intenso no sólo puede afectar a tus reservas de fluidos, los niveles de energía y electrolitos también se ven afectados.
CONCLUSIÓN: Bebidas deportivas que contengan entre 4 y 8 g de azúcares por cada 100 g, además de sales y minerales. Cuidado con las bebidas más dulces, pueden afectar negativamente a tu rendimiento produciendo un efecto contrario, al hacer que tu cuerpo segregue insulina para contrarrestar la subida de glucosa.
Entrenamientos de fuerza
¿QUÉ BEBO? Batidos de proteínas o un vaso de leche desnatada chocolateada
¿POR QUÉ? Los estudios demuestran que aporta el balance correcto entre proteínas e hidratos que tus músculos necesitan para recuperarse rápidamente del esfuerzo y mejorar la masa muscular en vez de perderla.
CONCLUSIÓN: Si no puedes recurrir a un batido comercial, puedes combinar 250 ml de leche desnatada y un par de cucharadas de cacao para hacerte algo similar.
Via: runners