¿Quién de vosotros ha visto alguna vez en el gimnasio una persona masticando chicle? Seguramente son muchas las personas que se ejercitan con una goma de mascar en su boca, sin embargo, nunca se han preguntado si es bueno masticar chicle mientras entrenamos.
Si bien es una cuestión muy personal y las respuestas pueden ser controvertidas, es claro que la goma de mascar requiere de un movimiento constante de la boca y puede entorpecer la respiración, algo muy importante mientras entrenamos.
Asimismo, muchas personas consumen chicle mientras ejercitan porque la salivación que su consumo produce evita la sequedad bucal durante el esfuerzo, algo bueno por un lado, pero que puede reducir la ingesta de agua, también imprescindible para sacar mayor provecho al ejercicio.
La sensación de frescura que un chicle puede dar en la boca, también es otra razón por la cual muchos lo consumen mientras entrenan, pero a pesar de ser una cuestión de preferencias y no existen estudios al respecto, muchos entrenadores y preparadores físicos desaconsejan consumir goma de mascar mientras entrenamos, pues la respiración no es igual, la agitación puede ser superior y aunque es mínimo, existe riesgo de ahogarse si el chicle pasa a las vías respiratorias mientras damos un salto o hacemos un movimiento brusco durante el ejercicio.
Personalmente creo que no es grato masticar chicle mientras nos movemos y más aun si queremos optimizar el entrenamiento respirando correctamente.