Hay dos formas de hacer dietas: una es la que cuenta los carbohidratos y la otra es la que cuenta las calorías. La dieta que cuenta calorías, tiene una amplia variedad de vegetales, frutas e infusiones. Dentro de los vegetales existe un reducido número que gastan más calorías en digerirse, que las que aportan.
Con algunos alimentos, el cuerpo debe trabajar más para extraer sus calorías, por lo tanto gastará no solo lo que aporta sino también algo de su reserva calórica para poder metabolizarlos.Para digerir un postre de 400 calorías, el organismo sólo gasta 150 calorías. las 250 cal. restantes se suman al cuerpo como reserva. Esas calorías deberán ser quemadas con ejercicios para que no se transformen en grasa.
En cambio, 100gramos de brócoli aportan 25 calorías. El organismo necesita 80 calorías para digerirlo, usando las 25 del brócoli y buscará en sus reservas el resto faltante. Por lo tanto: se ha consumido un alimento que aporta nutrientes y que consumió parte de las reservas del cuerpo, o sea de la grasa. La producción de energía depende de la ingesta de vitaminas y minerales.
Los cambios en el nivel de azúcar en sangre están determinados por el tipo y cantidad e los alimentos consumidos. Los carbohidratos simples se digieren rápido, generando que la glucosa ingrese rápido en la sangre. Después viene un bajón, que provoca fluctuaciones abruptas que siempre terminan en grasa acumulada.
Alimentos con calorías negativas:
- Manzana
- Espárragos
- Repollo
- Zanahoria
- Apio
- Limón - Pomelo
- Ajo
- Lechuga
- Tomate
- Agua
Hay algunos alimentos que elevan la velocidad del metabolismo:
- Morrones
- Mostaza
- Semillas de Lino
- Frutos rojos
- Canela
- Pomelo
- Ají picante
Para mayor estimulación metabólica, alternar días de alto y bajo consumo calórico, dentro de las 200-300 calorías de más o de menos. Esto impide el estancamiento en la quema de grasas y el peso corporal.
Via: eliteculturismo